miércoles, 14 de julio de 2010

Expedición Dynatech-Elevation al Alpamayo 5647 m



El año pasado, Dynatech-elevation, asumió el objetivo de coronar 'La montaña más fría del planeta', el Mckinley  (6236 m) en Alaska.

Raúl Martínez y Adrián Uclés, conseguían poner el nombre de Dynatech en el punto más alto de Norteamérica, contribuyendo así, con un nuevo hito en la historia del alpinismo aragonés.
Los avatares de la expedición los pudimos vivir minuto a minuto desde la web de Dynatech-elevation que puntualmente colgaba las crónicas que narraban nuestros expedicionarios. Compartimos sufrimientos y alegrías, comprobamos el tesón de unos hombres que no decaían ante las adversidades. Aprendimos de ellos que los sueños se pueden hacer realidad.


Después de esta experiencia, Dynatech-elevation, ha puesto sus ojos en 'La montaña más bella del planeta', el Alpamayo (5947 m). Para esta ocasión además de Raúl y Adrián, viajará Fran Lorente.
El 17 de Julio partiremos camino de Lima (Perú) desde allí nuestros pasos se dirigirán a Huaraz, lugar donde haremos los últimos reajustes logísticos y realizaremos el proceso de aclimatación, una vez completado comenzaremos nuestra andadura hacia el objetivo, la cumbre del Alpamayo. Nos queda por tanto, aventuras que vivir. Experiencias, que compartiremos con vosotros.


Ahora, momentos antes de partir, tenemos el nerviosismo habitual. Nuestro pensamiento se centra en el día de cumbre, en hacer bien las cosas, en aplicar la máxima concentración en la ascensión, en dosificar nuestro esfuerzo, en hidratarnos bien, en dar los pasos firmes, en asegurar la ruta, en la cima y en el retorno. El regreso, lo más importante, sin este gesto, esto no tiene sentido. Dejamos por un tiempo, un preciado ramo de gente que queremos, nuestra familia y nuestros amigos. Nuestra gente, personas que necesitamos para vivir, pero también necesitamos estas aventuras.

Los alpinistas somos seres egoístas, necesitamos sentirnos vivos. Y ese sentimiento, lo encontramos en las situaciones más primitivas, en los abismos, en altura, a más de 5000 metros cuando el aire esta enrarecido, cuando sólo dependes de ti.
Esperamos de corazón, ser capaces de transmitiros nuestras experiencias, para haceros cómplices de nuestra sinrazón y de esta manera, hacernos comprender un poquito más. Hasta la próxima.