jueves, 17 de marzo de 2011

BARRANCO LAPENILLA

        En un paraje bastante desconocido, más allá del templo budista de Panillo, existe un corte algo profundo que tiene bastante carácter de barranco. Es Lapenilla. Se eligió como descenso para la actividad mensual de barranquismo del Club Montisonense de Montaña  por tratarse de un descenso corto, con un acceso inmediato y un retorno cómodo. Características esenciales en un descenso de club con personas que se están iniciando en el final del invierno, con días aún cortos y a veces fríos.


         Por dar algunos datos, el acceso es inmediato desde el pueblo abandonado que da nombre al barranco. El descenso yendo nueve personas nos costó dos horas y media. El retorno con combinación es de 20 minutos y sin combinación de 45 min. Su longitud es de 500metros, su desnivel de 140 metros y el rápel más largo de casi 40 metros.


        Por suerte aún encontramos algo de agua corriente, fría y cristalina. El barranco tiene ciertos rincones estéticos. Algunos rápeles acanalados que merecen la pena y pozas llenas que son difíciles de evitar. Al final está la parte más esculpida. Primero el encadenamiento del R20 + R40 y que te lanza a un circo abierto donde siempre sopla el aire. Después se vuelve a cerrar en una serie de marmitas finales destrepables y un último rápel con inmejorables vistas del pantano de Mediano, enfrente de su vecino opuesto, barranco de Abizanda.


                     SECCION BARRANQUISMO, Club Montisonense de Montaña - Pepe Guerrero.