El pasado domingo día 21, unos cuantos senderistas del Club Montisonense de Montaña subimos a la Tuca de Paderna.
A las 6:30 de la mañana salíamos de Monzón en dirección a Benasque para tomar el bus que desde los Llanos del Hospital nos deja en la Besurta. Tras dos salidas de senderismo que se tuvieron que anular por mal tiempo, esta vez el día amanecía despejado, resultando después realmente caluroso.
En esta ocasión nos acompañaban Jan y Javier, y como estábamos poquitos, todos echamos una mano para ayudar a que estos incansables compañeros llegaran a la cima de la Tuca, siempre bajo las indicaciones de Ricardo, verdadero experto en este mundo de la guía de invidentes en la montaña.
La ruta elegida para subir y para bajar era por el refugio de la Renclusa y el ibón de Paderna. Nos poníamos a caminar en torno a las 9 de la mañana, cruzándonos a algunos montañeros que bajaban de pasar la noche en el refugio. Tras descansar un poquito en los prados que rodean a la Renclusa, nos acercamos al ibón, territorio conquistado por las vacas que completan el ambiente de montaña… Ya podemos ver claramente el objetivo del día, la Tuca de Paderna desde aquí parece infranqueable!!
Rodeamos el ibón y buscamos una ruta “alternativa” para facilitar la progresión de Jan y de Javier. Poco a poco nos acercamos al collado del torrente del Alba desde el que ya tenemos buenas vistas hacia el Perdiguero. Ya solo tenemos que bajar un poquito para alcanzar el collado de Paderna y subir la pala final. Ahora que lo tenemos tan cerca todo ha parecido más fácil de lo que pensábamos desde abajo …
Poco antes de la una del mediodía llegamos a la cima. Nos rodea el Perdiguero, Maupas, Sacroix, Salbaguardia, Maladetas y su glaciar, Alba … gran ambiente de montaña.
Comemos tranquilamente, pero el sol es de justicia, así que sobre las dos nos vamos para abajo. Una vez en el collado del Alba bajamos siguiendo la senda paralela al torrente, en dirección a la Renclusa. Disfrutando de este paisaje de montaña y con tranquilidad, poco a poco llegamos hasta la Besurta de nuevo, donde nos refrescaremos con ganas después de estar siete horas bajo el sol …
Finalizamos así una estupenda jornada de montaña donde todos hemos podido disfrutar de uno de los entornos más espectaculares del Pirineo.
